miércoles, 24 de noviembre de 2010

Tontunas varias: ser una pija inglesa

Seguimos con el curso de arte para ser una pija inglesa...






Está claro que para ser una pija como God manda hoy en día, no hace falta saber quién es Velázquez ni cosas de esas, no, no. Lo importante es estar al día de arte moderno, según el manual de la pija inglesa, el arte moderno es como el sushi, una vez lo pruebas, le coges el gusto y ya es un no parar. Bueno, en mi caso la verdad es que ha sido probar el sushi y aprender a decir: "No quiero washabi infernal, gracias". En cuanto al arte moderno, es algo que llega a tal abstracción que más bien lo compararía con las matemáticas "no hay quien cojones lo entienda". Pero bueno, hagamos como que nos interesan las ecuaciones de doce incógnitas con tirabuzón y el arte conceptual.

Está claro que para ser fahsion, no se puede ir a galerías españolas cutronas, con gente cuyo apellido acaba en "-ez" y cosas peores. Así que, para mi única amiga en Londres aquí van unos must:

En Londres visitar la
Serpentine Gallery, con esculturas de jardín dedicadas a Lady Di y exhibiciones que presentan obras del calado de "Señora echando la siesta en la vitrina de El Corte Inglés" a.k.a "The Maybe".



Creo que ya no está, la quitaron cuando se despertó...



Eso sí, es gratis, como solían ser todos los museos de Londres la última vez que fui.
También está
Hayward, que la verdad es que tiene algo que mola, una zona para remar con tu barca escultórica...






Arte no sé si será, divertido, parece...







La galería Whitechapel que en su día tuvo el Guernica pero ahora tiene cuadros de colores...







¿Qué le echa esta gente al parquet?




Galería Saatchi que se dedica a la rica controversia...





Nada una cosa discreta, algo poco ostentoso...



Que ya, como es museo, empieza a ser más interesante. Supongo que lo recomienda porque es de arquitectura y podrás encontrar un arquitecto o algo...




Y el museo Courtauld ideal para impresionar a ese gafa-pasta progre de turno.



¿Qué le pongo, el agua del florero?




Para ir el fin de semana si llueve (o sea, siempre)...

Stanley Spencer Gallery en Cookham, que está dentro de una iglesia metodista y tiene cuadros de... Stanley Spencer, muy conocido en Cuenca.


La alegría de la huerta...

Otra alegre visitilla de fin de semana es ir a Charleston House donde se reunían los del Bloomsbury Group (Virgina Woolf y compañía). De este os dejo una vídeo demostración...











¿A qué viene tanto arte en mis consejos para ser una pija inglesa? Eh aquí el verdadero motivo... Si quieres conseguir un novio gafa-pasta inglés o ponerte hasta las trancas de comer y a la vez sentirte decadentista, puedes darte una vuelta por la cafetería de estos lugares con unos Manolos (si es que tus pies lo aguantan).

Si lo que buscas es un madurito intelectual, nada mejor que las galerías
Chisendhale y Lisson
pero la crème de la crème de la intelectualidad se da cita en la
ICA.

También hay ferias donde comprar arte a todo a 1000 (euros): podéis pasaros por el equivalente de ARCO en Inglaterra:
Frieze donde podréis compraros cosas como esta:


Esta es ideal para el jardín, seguro que no entran chechenos-robachaletes

También está la Afforable Art Fair para arte todo a 100 (euros y de ahí p'arriba).


Lo traigo barato, oiga, al rico cuadro rosita...

También recomienda ir a la tienda de la National Gallery para comprar regalos de Navidad y la verdad, tienen cosas chulas... Claro que mejor ir al Prado que pilla más cerca. Otra idea que propone es comprar regalos en la Photographer's gallery aunque tira un poco de espaldas que pongan una selección de fotos a 600 libras de nada. En Madrid no hay museo de fotografía, qué cosas, de hecho solo hay un museo de fotografía en toda España así que si quieres fotos: a Londres.

Para el veranito, museo playero de arte contemporáneo en St. Ives: un Tate



Lo más bonito, sin duda, el edificio y la playa cuando hace sol




Y hasta aquí, mis consejos de hoy... Me he quedado tan ancha...
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lunes, 30 de agosto de 2010

El peregrino despistado - Crónica de un viaje por El Bierzo

Como más vale tarde que nunca, retomo mis narraciones viajeras cual tío Matt.




Heme aquí con mi pata chula subiendo un puerto...

La última semana de agosto la pasé haciendo un viaje cicloturista por El Bierzo leonés y parte de la Maragatería. Todo esto con una rodilla medio estropeada (¡patachulas al poder!).
El periplo comenzó un viernes al medio día en Chamartín, donde cogimos el tren rumbo a León (era un tren de los que admiten bicicletas, claro está, aunque cuatro como máximo). En ese tren solo fuimos dos ya que la mayor parte de la gente se fue en el de las cuatro de la tarde, que tenía tren furgón y cabían más bicicletas, o en coche. En total iniciamos la aventura unos trece osados aunque tuvimos un pico de quince excursionistas.




He aquí el principio de la excursión, cuando todavía olíamos bien...


Una vez en León, con cojera y rachas de fuerte cojera, nos dirigimos al Albergue Municipal de León. El albergue tiene un aspecto un tanto destartalado desde fuera pero las instalaciones están bastante bien. Tiene habitaciones de ocho, dos y cuatro personas a un precio razonable. También tiene albergue de peregrinos, pero las condiciones son peores y no se puede reservar. Esa misma noche, nos dimos una vueltecita por León donde quedé con un amigo que vive allí y su chica, que se ofrecieron a hacernos de guías para ir por el Barrio Húmedo. Poco a poco nos fuimos reuniendo todo el equipo de la excursión.



No éramos todos estos, era el aparcamiento de bicicletas de peregrinos...



El barrio húmedo de León merece la pena tanto desde el punto de vista de ambiente nocturno, como por las tapitas ricas que dan. Tampoco nos recogimos muy tarde porque, al día siguiente, había que madrugar para comenzar la aventura del espacio exterior.

La primera etapa fue de León a Barrios de Luna, la verdad es que dimos un poco de vuelta porque en principio son cincuenta kilómetros, pero la cosa se alargó y acabamos haciendo unos setenta. Lo más curioso de la etapa fue ver los campos de lúpulo. El lúpulo es uno de los ingredientes de la cerveza y se paga ¡a 1000 € el kilo! Me llevé un par de florecillas, lo menos diez céntimos, oiga. En Barrios de Luna, como más bien estábamos hechos polvo, decidimos dormir en una pequeña pensión que hay en la parte baja del pueblo: Apartamentos Pepe y Mari... Además nos dieron una rica cena a base de huevos fritos con patatas y chorizo cabreado (picaba bastante).




Aquí la mesa para la opípara cena...

La segunda etapa fue de Barrios de Luna a Villablino. La cosa ya empezó a ponerse empinada, pero más o menos era llevadera, excepto el tramito final... Una cuestecita importante que nos dejó en Villablino, un pueblo bastante grande encajado entre dos montañas. Allí, nos pasó una de las cosas más surreales que se ha dado en un viaje de Pedalibre. De pronto, apareció un señor montado en una BH del año de la Tana... Decía que se quería unir a nosotros durante un par de días, que había visto la excursión en Internet. Lo raro era que en Internet solo decía "Excursión por El Bierzo leonés", así en general... Estábamos un poco perplejos, pero le dijimos que adelante. El pobre hombre se convirtió en leyenda y todo tipo de rumores empezaron a correr en el grupo... El más gracioso era que si se trataba de "El cicloturista de la curva", un cicloturista que no pudo acabar una excursión porque se lo comió un oso y que se aparece a los grupos de ciclistas de Villablino las noche de luna llena. Al final, el misterio se resolvió, resultó ser amigo de una chica que se unía a nosotros esa misma noche y que le había dado todos los detalles de la excursión. Para colmo, había vivido en Las Rozas y hablaba cuatro idiomas lo menos (algo poseso sí que estaba igual, tanto idioma no es normal).




El carísimo lúpulo y la bicicleta de una víctima del Cicloturista de la Curva




Ese día se dio mal lo de encontrar alojamiento y dormimos en un descampado cerca de una fuente, al lado de una Vía Verde que hay por allí. El pueblo vecino estaba en fiestas y se oía el chunda-chunda en la lejanía... No se nos comió un oso.


Lunes. Las cuestas no habían hecho más que empezar y yo ya tenía la rodilla un poco hinchada. Para rematar el asunto, tras recorrer un trecho la Vía Verde y visitar el Centro de Interpretación del Urogallo (que no tiene nada que ver con el teatro ni Uruguay, aunque a todos nos sale decir uruguayo en vez de urogallo, decidlo en alto: "El urogallo uruguayo") en Caboalles de Arriba (nótese el arriba), nos enfrentamos al puerto más emocionante del día... para cruzar a Asturias. Puertito de 1400 metros... Luego bajamos hasta Degaña a comer y celebrar una alegre bajadita. Fue curioso ver el cambio climático entre León y Asturias. De sol de justicia a lluvia en solo un sistema montañoso. Aún quedaban dos puertos por delante. La idea era llegar a Villares de Arriba (otra vez arriba) y al día siguiente ir hasta Peranzanes y Lillo del Bierzo. Pero como yo no tenía la rodilla muy estable y parte del camino había que hacerlo por pista, hicimos una excisión de dos personas y nos lanzamos a lo que me dijeron que era"un atajo"...




¡Qué bonito es Asturias de Arriba!


Como tenía la rodilla mal y no podía ir por pista, estaba claro que la mejor opción era hacerme 80 km y tres puertos hasta Lillo del Bierzo. Para no tener que dar un rodeo, volvimos sobre nuestros pasos a subir el puerto que acabábamos de bajar hasta Carredo. Allí en Carredo hay una carretera que pertenece a una mina, pero que se puede utilizar. La ventaja respecto a las carreteras convencionales es que es bastante tendida, porque la tienen que usar camiones cargados de carbón. La carretera es ancha y está en bastante buen estado, pero hay que tener un poco de suerte y que no te toque cuando hay tráfico de camiones. Nosotros la tuvimos y fue un ascenso y descenso (espectacular) bastante tranquilo. El problema es que bajamos de más. La carretera minera va a morir en CL631 y de ahí empezamos nuestro periplo hasta Lillo del Bierzo. 17 km más cuesta arriba... Yo creía que me daba algo. Casi al anochecer, llegamos al campamento base... El camping Los Perdigones uno de los pocos que hay abiertos por la zona. ¡¡¡80 km de atajo!!!... Lo celebramos con una pizza casera y una gran jarra de cerveza que me supieron a gloria bendita.


¡Qué bonito ir cuesta abajo!

El siguiente día, era de medio descanso rodillil. Dejando las alforjas en el campamento base, nos lanzamos al encuentro del grueso del grupo, a mitad de camino de su puerto y nuestro camping: en Castro de Chano. La carretera que lleva allí desde Lillo de Bierzo es bastante bonita y bastante cuesta arriba. Hay pueblecitos acá y allá, todo verde, riachuelos... Muy idílico. La recomiendo.




Hola, señor astur, le importa que pase...

Castro de Chano es un castro bastante bien conservado que se dejaron ahí puesto los astures. Por supuesto lo colocaron en lo alto de la montaña: cosas de las civilizaciones antiguas, que se ve que tenían unas buenas rodillas. Como se les cayera la lanza rodando, ya tenían pateada para todo el día. Tiene un centro de visitantes la mar de chulo que ha reconstruido las casas de los astures y te explican cómo era la vida por aquellos lares en los tiempos de Maricastaña. Lo curioso es que, hasta hoy en día, hay casas que construían los paisanos de León, que poco más o menos son una versión mejorada de la de los castros: la misma piedra, el mismo tejado... Solo que los astures tenían al ganado a parte, y sus descendientes leoneses decidieron que la calefacción animal venía bien y tenían a las vaquitas guardadas en casa (con cuarto propio, eso sí).

En Castro Chano nos reencontramos con el grueso del grupo y, ya por la tarde, comenzamos el alegre y rápido descenso hasta Lillo del Bierzo, donde íbamos a acampar durante un día. Lo mejor de la tarde, sin duda, fue el baño en la esplendorosa piscina municipal del lugar.


La siguiente jornada fue de recuperación y descanso (vamos, de perrear). Tenía la pata más tiesa que un ojo de madera y me pasé la mayor parte del día en la mega-piscina municipal dándome a la buena vida. Por la tarde me animé a dar una vueltecita en bici por Lillo y Fabero (la verdad, me dolía más ir andando que en bici). De Lillo salen muchas rutas de senderismo y el resto del grupo, a parte de perrear, se dió un garbeo hasta el río a última hora de la tarde.




Angela Channing con bigote...

El jueves se acabó lo de descansar y retomamos la vida nómada. Fue una etapa relativamente sencilla en dirección a Ponferrada. Ahí ya empezamos de nuevo a ir en sentido contrario al Camino de Santiago. Fue un día cargadito de visitas. La primera parada la hicimos en el Palacio de Canedo , el Falcon Crest del Bierzo, donde tiene su restaurante "Prada a Tope" un señor (Prada, que va siempre a tope) de lo más peculiar. Es un hombre que en su época fue rocker y llevaba un bigotón tipo Samuel L. Jackson en Pulp Fiction... Todo un personaje, que con sus pintillas y lo que tu quieras, se ha montado un emporio. Tiene unas habitaciones en el palacio que tal y como prometió: "Te caes de culo, querida". El restaurante tiene unos platos riquísimos a un precio muy razonable y, todo lo sucios y andrajosos que íbamos, con culotte y camisetas de colores, nos atendieron igual que bien que al resto de la clientela. El menú viene a salir entre veinte y treinta euros por cabeza, pero merece la pena. Después de comer, hubo siestorro general en Vega de Espinadero, a la sombrita de los árboles, junto al río, contemplando a los jóvenes suicidas lanzarse desde el puente al río (pa' mear y no echar gota)...



Por fin salimos rumbo al castillo de Priaranza. El problema es que la cosa se extendió demasiado y no logramos llegar al castillo, nos quedamos a unos entre 3 y 5 km (dependiendo del paisano, unos decían una cosa y otros otra) en un pequeño pueblo, de cuyo nombre no puedo acordarme, donde la Alcaldesa nos dejó la Casa Consistorial para dormir.

Viernes

No sabíamos la que se nos iba a venir encima (bueno, los que entienden de perfiles, igual sí). Pasamos por Ponferrada a tomar un desayuno rápido y un helado (lento) para enfrentarnos al gran puerto: el Puerto de la Cruz del Ferro. Normalmente, la gente lo hace desde el lado de Astorga y ya se queja. Desde Ponferrada hacia Astorga, la cosa es tremebunda, de hecho la gente del lugar, tras tratar de informarnos sobre que Santiago era para el otro lado, se quedaban bastante impresionados cuando averiguaban nuestros osados planes.



¡Oiga, que no es por ahí, que por ahí hay una cuesta tremendaaaa!...




Fue todo el día cuesta arriba y a pleno sol, y cuando crees que ya has llegado... ¡nada más lejos de la verdad! Seguía y seguía... Por fin llegamos a la dichosa cruz, donde se supone que los peregrinos dejan una piedra, que han de traer desde su lugar de origen, para purgar sus pecados y dejarlos atrás. La verdad es que la gente, a parte de piedras, dejaba de todo... hasta un Shrek vimos, supongo que sería por algún pecado verde. En fin, nosotros no dejamos nada ni nos llevamos una piedra para llevar la contraria. Nos limitamos a seguir camino e ir hasta Rabanal del Camino (valga la redundancia), un pueblo básicamente hecho de albergues y restaurantes peregriniles. Nos hospedamos en el albergue municipal que no te pedía credenciales de peregrino ni nada en la vida, al contrario que en Astorga, que en algunos casi te obligaban a ir a misa.

Nos dimos un homenaje peregrinil con una buena cena a buen precio (no como el desayuno... el desayuno del peregrino es carísimo). ¡Lo habíamos logrado! Habíamos superado aquella cuesta cuestosa y al día siguiente nos tocaba un paseo todo hacia abajo hasta Astorga.



Llegó el último día. Fue un trayecto cuesta abajo impresionante... Todo lleno de peregrinos en dirección contraria sudando la gota gorda (¡venganza!, el día anterior había sido al revés). Para alargar la cosa paramos en un par de pueblecillos astorganos de un color completamente diferente al de los de León. Es un cambio radical del verde al rojo, de León a Castilla.

Por fin llegamos a Astorga, con tan buena (o mala) fortuna de que eran las Fiestas de Santa Marta, concretamente, en la que se denomina la "Noche Larga". El plan era coger un autobús a la una rumbo a Madrid (sobrecargo de 10 € por bici con ALSA). Comimos una mantecada o dos, visitamos el museo de chocolate (curioso pero no imprescindible, mola más el de Colonia) y nos dedicamos a la buena vida. Las fiestas de Astorga no las viví demasiado porque teníamos que llevar a todas partes las bicis. No teníamos buenos candados, y no era plan de dejar las bicis con alforjas y todo en mitad de la calle, con hordas de borrachos circulando por el lugar. Me gustó mucho, tanto la ciudad como la gastronomía.

Y así acabó el viaje... Podéis (entre)ver el siguiente itinerario para haceros una idea de lo que fue, no se ve muy bien, pero si a alguien le interesa, que lo pida...


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lunes, 9 de agosto de 2010

Curso de aikido en Bustarviejo

Este fin de semana, en vez de hacer como la gente normal y descansar me he ido a Bustarviejo a hacer un curso de aikido.


Como podéis apreciar salgo en la foto... (5.ª empezando por la izquierda segunda fila).

La idea era poner a prueba mi rodilla mala y ver si ya estoy lo suficientemente en forma como para poder volver a practicar con asiduidad e intensidad. La gente se pasaba allí una semana entera, pero yo solo fui durante el fin de semana... tampoco era cuestión de exagerar. Superé la prueba mejor de lo esperado. De hecho, solo sentí un pinchazo en la rodilla durante las sanas matutinas de yoga y todavía no tengo agujetas.

¿Cómo es un curso?


Te levantas a las siete y media de la mañana (con resaca opcional).

Clase de yoga y respiraciones para despejarse.

Desayuno con galletas.

Primera clase de nueve a diez y media.

Segunda clase de de diez y media a doce.

Descanso para piscina, aperitivos y comentar la jugada (piscina opcional).

Comida a las 14:00.

Siesta, lectura y regocijo.

A de 17:00 a 18:30 clase técnica.

De 18:30 a 19:30 clase de armas.

Suelta hasta las 21:00 para ducha y aseo general.

21:00 Cena y cervecitas.

Más comentarios de la jugada con orujo y cerveza al gusto de cada uno.


Los intervalos para cerveza son dignos de Pedalibre :).


Lo bueno de ir a cursos es que tienes oportunidad de trabajar con gente con un nivel muy superior al tuyo, que quizás puedan explicarte alguna técnica que no entiendas del todo de forma que algo entiendas... Si te quedas solo en tu dojo, no tienes oportunidad de probar más que con la gente de tu dojo y habrá cosas que tardes más en aprender.
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jueves, 22 de julio de 2010

La T4: tucos variados

Si alguna vez tenéis que ir a la T4, tened en cuenta que...



1- En coche:



No os fiéis de las señales que indican T4, lo más probable es que acabéis en la autopista de peaje. Al principio, tirad como para ir al aeropuerto normal (T1, T2 y T3) una vez veáis que ya estáis donde los edificios del aeropuerto (sin meteros, claro) entonces sí, seguid los carteles hacia la T4.




2 -En Metro:

Ir a la T4 o al aeropuerto tiene un suplemento de un euro... Pero, se puede ir en autobús desde el intercambiador de Avenida de América sin pagar ningún tipo de suplemento. Así, si vivís cerca de la zona o de alguna de sus paradas u os pueden acercar, ya sabéis. Este es la información de tan ahorrativo invento.



Línea 204. Avenida de América - Aeropuerto (T4)
Itinerario:

Avenida de América-Aeropuerto: Intercambiador de Avenida de América (dársena 17)-Avenida de América-Avenida de la Hispanidad (M14)-M13-M12-T4 llegadas.

Aeropuerto-Avenida de América: T4 llegadas-acceso a M12-M13-Avenida de la Hispanidad (M14)-Avenida de América-Intercambiador.

Sale bastante a menudo.


3- En taxi:


Es la opción más cara. En este caso, sale a cuenta ir por la autopista de peaje porque, aunque te carguen el peaje, sale más barato que los kilómetros.



4- En bici:


Es posible, solo habría que ir hasta Alcobendas y: "... pillar la carretera M110, luego atravesar la urbanización "La Moraleja" y luego entrar en Alcobendas pasando por debajo de la A1. Luego atravesar Alcobendas para llegar a la carretera M616 (El Goloso) evitando la circunvalación que sube y baja y sube otra vez". Esta información la he sacado de la lista de correo de Pedalibre. Si tenéis cualquier duda, poneros en contacto con ellos o conmigo, a ver si os puedo ayudar.





Espero que estos trucos os resulten útiles si os dejan viajar los controladores estresados.
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miércoles, 21 de julio de 2010

Gooveshark

Únete al tiburón marchoso...



Mi más encarecida recomendación para esta aplicación online... Es como Spotify o Lastfm pero con la ventaja de no tener que instalar ningún software, sin invitaciones y sin publicidad. Tiene la interfaz traducida, puedes crear playlists y he encontrado de todo. También te sugiere canciones según tus preferencias, o no, lo que quieras... ¡Vamos, estoy encantadísima!

http://listen.grooveshark.com/

Hala, ahí os dejo el enlace.
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martes, 20 de julio de 2010

Sol

Como lo prometido es deuda y hasta que descubra o me descubran otra curiosidad lingüística digna de mención... Vamos con el Metro de Madrid.




Iré contando información y curiosidades sobre las estaciones de metro, sus nombres y su entorno. Creo que lo suyo es empezar por la estación de Sol que, además, es el corazón de mi cordialmente odiada ciudad.

Sol fue la primera estación de la primera línea del Metro de Madrid, la Línea 1 (¡sorpresa!). Al principio, el metro solo iba de Sol a Cuatro Caminos. La idea, en su momento, fue hacer líneas radiales desde la Puerta del Sol como si fuera Ámsterdam, pero parece que la cosa se les fue de las manos. Por Sol, pasan las líneas 1, 2 y 3 (fíjate que bien) además de tener correspondencia con Cercanías, gracias al Túnel de la Risa. Los andenes de la Línea 3 de esta estación son los únicos de toda la red de Metro que no son paralelos (se alargan en direcciones opuestas). La estación también, tiene comisaría de policía incorporada, para que puedas ir directamente cuando te roben la cartera (un detallazo). Esto es lo más relevante respecto al interior, a parte de que el suelo les ha quedado de tres colores con la ampliación y de que si sigues las flechas, puedes acabar subiendo más escaleras de las necesarias. Tiene tres salidas, aunque salgas por la que salgas estarás en la Puerta del Sol (no hay puerta).

De todos los edificios que circundan esta plaza-puerta el más antiguo es la Casa de Correos (antigua sede del Ministerio del Interior y actual sede de la Comunidad Autónoma de Madrid). Para que nos entendamos, es el edificio ese rojo con el reloj que sacan cuando las campanadas. El segundo edificio más antiguo es el de la Casa Cordero que está según se enfila la calle Mayor.


¿Por qué se llama Puerta del Sol a la Puerta del Sol si no hay puerta ni nada?

La Puerta del Sol a principios del s. XIX con la fuente a superchorro...


Según los historiadores, el origen de este nombre puede deberse a que cuando Madrid era Magerit y estaba en manos de los "moros" había una alcázar circundado por una muralla. Las murallas árabes solían tener una Puerta del Sol que era la de principal acceso a la ciudad (en Toledo tienen una Puerta del Sol con puerta incluida). La famosa Puerta del Sol se supone que estaba situada en la calle Preciados. Por aquel entonces, no había plaza ni nada, solo el cruce de varias calles. Con el paso del tiempo, mandaron tirar la muralla, la puerta y todo y hacer una especie de plaza (un paso ensanchado) con fuente (la fuente de la Mariblanca, ahora hay dos cutrefuentes en forma de cenicero). En el siglo XVI, la Puerta del Sol era un lugar de importancia menor comparado con la Plaza Mayor, que era donde tenían lugar todos los saraos como ejecuciones públicas y otras actividades lúdicas de la época. En la Puerta del Sol lo que había eran mercadillos ambulantes (han vuelto en forma de top manta) y mucho trajín de gente. El centro de Madrid no se consideraba en absoluto este lugar, que era lugar de paso más bien a las afueras...






Antes y después...


El relleno de la Puerta del Sol también ha sido de lo más variado. De hecho, en el S. XVI en todo el centro de la plaza, se encontraba una iglesia: la Iglesia del Buen Suceso, que empezó siendo un hospital para apestados y acabó siendo derribada con la Desamortización de Mendizábal. Resulta que, durante las obras del Túnel de la Risa, encontraron los cimientos de esta iglesia y tuvieron que parar el asunto durante un mes. Se vieron obligados a trasladar los restos piedra a piedra y ahora, en la estación de Cercanías, se pueden ver los cimientos de tan vetusto edificio; (siempre me acuerdo de lo que debe ser hacer el metro en Roma cuando surgen este tipo de noticias). También se encontraron restos humanos de la época de la Guerra de la Independencia que se creen pueden pertenecer a algunos fusilados. No me ha quedado claro que han hecho con los pobres, igual les pasa el metro por encima.
La Puerta del Sol también fue el lugar de uno de los mentideros de la corte, el denominado Mentidero de los Soldados, donde los quintos de Flandes se reunían para marujear. Ahora nos escandalizamos con ¿Dónde vas, corazón? y programas similares, pero lo que se ha hecho es traer el marujeo de la calle a la comodidad de nuestros hogares, quitando también la posibilidad de interactuar con los vecinos... No sé si es peor o mejor. Gracias a su mentidero, poco a poco la Puerta del Sol fue robando protagonismo a la Plaza Mayor.


La Mariblanca bebiendo calimocho y no le quiere dar al niño...

Las figuras más emblemáticas de la Puerta del Sol son el Oso y el Madroño (bueno la osa, o el oso castrati), la estatua de Carlos III, el cartel de "Tío Pepe" y el kilómetro 0. En estos puntos es donde se suele quedar hoy en día, aunque muchos de estos elementos nos los cambian de sitio para mosqueo del personal. Sin embargo, hay otra estatua que por ser pequeñita y tener tan poca voz suele pasar desapercibida, aunque es una de las habitantes más antiguas de la plaza: la estatua de la Mariblanca. La Mariblanca culminaba la Fuente de la Fe, que estaba situada frente a la mencionada Iglesia del Buen Suceso. La fuente era bastante grande ya que a ella iban a surtirse aguadores y criados de la zona. No está claro si es una diosa griega o una alegoría de la fe (tanto monta, monta tanto) pero se la llamó Mariblanaca por lo blanco de su mármol. La pobre mujer ha pasado por El Retiro, Recoletos y luego se llevó a un museo porque en los años setenta la rompieron. No me ha quedado claro si tras la última reforma han puesto la original o una réplica... De hecho, había una discusión sobre qué museo tenía la original. En fin, original o reproducida, ahora ahí está y puede ser un buen lugar para quedar sin aglomeraciones, en la entrada a la calle Arenal. Tras la reforma del s. XIX también pusieron una fuente de chorro (véase foto más arriba) en la Puerta del Sol, pero como mojaba a los viandantes, la apagaron. Posteriormente, la trasladaron a Cuatro Caminos y por último a El Retiro donde está echando agua a los patos frente al Palacio de Cristal.


La mudanza de la estatua...

La estatua del Oso y el Madroño que data de 1967, es, junto a la Mariblanca, parte del comando itinerante. Representa el escudo de armas de la ciudad de Madrid que antes solo tenía un oso pero que, por un litigio ganado por el concejo madrileño allá por el siglo XIII, pasó a tener un madroño (ya que los frutos de los árboles de váyase usted a saber qué campo pasaron a ser del concejo). Ahora no quedan ni osos libres ni madroños salvajes en Madrid. Para colmo, en el fondo no está nada claro que el árbol sea un madroño y el oso más bien es una osa. Total que en realidad el escudo de Madrid es una osa y un árbol raro en vez de lo que dice la heráldica: "De plata, un oso, de sable apoyado en un madroño de sinople o natural frutado de gules. Bordura de azur cargada de siete estrellas de plata. Al timbre, corona real abierta".
La estatua se colocó primero entre la calle Alcalá y la Carrera de San Jerónimo, luego pasó a situarse frente a la calle del Carmen y el año pasado (2009) la volvieron a cambiar a su lugar original, para desconcierto de todo los que quedábamos allí.


Otro antes y después....



El kilómetro 0 se encuentra a la puerta de uno de los edificios más famosos de Madrid, la Real Casa de Correos (el edificio de las campanadas) que se construyó con la llegada de Carlos III, el Rey-Alcalde. Yo estuve dentro durante su remodelación (derribaron todo y dejaron solo la fachada para acondicionarlo) y pude tocar la bola de las campanadas (cosas de tener contactos entre los restauradores). A la entrada, tiene una placa conmemorativa del levantamiento del 2 de mayo y otra del 11-M. El reloj de la Puerta del Sol es del s. XIX y se decía que funcionaba tan mal como el gobierno que tenía debajo, ¿se repetirá la historia?
El kilómetro 0; podría tener su origen en que cuando se empezaron a numerar las casas de Madrid, allá por 1834 se hizo según su cercanía a la Puerta del Sol. Pero, su historia es mucho menos romántica: se puso en 1950 para marcar el origen de las carreteras radiales que salían de Madrid. Más adelante, se recalculó cuál era el verdadero origen de estas carreteras llegándose a la conclusión de que en realidad debía ser en el Museo de Prado, aunque como era un icono urbano, no era cuestión de quitar la placa. Este lugar también marca la altura de la capital del reino: 635 m sobre el nivel medio del mar en Alicante. La placa original se cambió en 2009 por una más brillante y marrón... La verdad es que la antigua era ya más bien era un cráter, pero le ha quitado encanto.

Gracias Tío Pepe por mostrarme el camino tantas veces...


En cuanto al cartel de Tío Pepe, faro de tantos borrachos que quieren llegar a Sol a altas horas de la madrugada, se instaló en la fachada del Grand Hôtel de París que se construyó tras la reforma de la Puerta del Sol del s. XIX. En 2006 cerraron este hotel. En sus bajos estaba uno de los antiguos cafés en los que se reunían, en famosas tertulias, gente como Valle Inclán, que perdió un brazo en semejante lugar y, también, un tal perro Paco, que iba a los toros (esta es su historia). Vamos, que según vas investigando te das cuenta de que se están zumbando medio Madrid histórico para hacer centros comerciales. De hecho, el único establecimiento del s. XIX que queda en la plaza es la pastelería La Mallorquina. El cartel de Tío Pepe se salvó en un principio por el alto coste de su retirada y luego, por votación popular en los años '80 (junto al cartel de Schwepess de Gran Vía); ¿lo quitarán algún día para poner un Zara?

Carlos III antes de que le pusieran el aparto antipalomas...

En cuanto a la estatua de Carlos III, resulta que es del s. XX, de hecho es de 1994, aunque yo juraría que siempre había estado ahí. Será porque pone "MADRID AL REY ILVSTRADO" y todos sabemos que si aparece una V en vez de una U tiene que ser, como mínimo, de la época de los romanos. El caso es que su ubicación se decidió por referéndum popular y yo ni me enteré. Tiene una inscripción de doce líneas y para leerla hay que dar otras tantas vueltas a la estatua. En al inscripción también se usa la V en vez de la U (no os vayáis a creer que entendéis castellano antiguo de repente). Se esculpió según un modelo de de 140 por 160 centímetros y se le puso la cabeza según los retratos de Goya. Como las palomas lo ponían fino, tuvieron que instalarle un dispositivo electrónico para ahuyentar a estas aves.


Boca horrible de metro, nombre oficial: pez de cristal...



Por último, recientemente han creado una nueva seña de identidad para la Puerta del Sol es una especie de iglú de cristal que da entrada a la nueva estación de Cercanías y también al metro. Es como la pirámide de Louvre pero en cutre.

Hoy en día en la Puerta del Sol no queda ni un convento, ni un mentidero, ni un café de tertulia, ni nada. Eso sí, ahora es prácticamente peatonal, cosa de agradecer, y siempre se puede ver alguna manifestación, predicadores, montones de guiris cual gambas al ajillo...

De postre, que sepáis que el nombre del primer madrileño que se conoce en la historia es Âbû-l-Qâsim Maslama ibn Âhmad al-Faradi al-Hasib al-Qurtubî al-Maŷrîtî. Imaginaos a su madre asomada a la muralla en la Puerta del Sol gritando: Âbû-l-Qâsim Maslama ibn Âhmad al-Faradi al-Hasib al-Qurtubî al-Maŷrîtî, la meriendaaaa...


Fuentes: Wikipedia (todo lo que sé, lo aprendí en la Wikipedia)

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lunes, 12 de julio de 2010

¡¡¡Campeones del mundo!!!

Ete, ete, ete... ¡VIVA ALBACETE!




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jueves, 1 de julio de 2010

Metronome

Siguiendo con el tema de moda esta semana, el último libro en francés que me he leído...

Gafapasta francés en estado puro... Como lo vea mi hermano...

Título: Métronome
Autor: Lorànt Deutsch


Librillo original en el que se repasa la historia de París de estación de metro en estación de metro (no todas, claro, si no sería una enciclopedia). Es interesante y te da pistas y detalles sobre dónde encontrar restos del París primigenio. En mi opinión, peca de centrarse demasiado en la historia de los galos y las tribus germánicas (no las del 45, las de la Edad Media) y poco en los intríngulis de la Revolución y otras épocas variadas, que en París se ha cocido media historia de Europa. Para un parisino, será más entretenido porque entenderá de qué calles y edificios está hablando. Pero si te gusta la historia, es interesante ver la perspectiva de los franceses sobre sí mismos.

Me ha dado una idea para escribir la historia de los nombres del Metro de Madrid.
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miércoles, 30 de junio de 2010

Huelga de Metro




Ya que bajan los sueldos a los funcionarios un 5% han intentado hacer lo mismo con los empleados de metro que, claro, no son funcionarios y se ha liado parda.






Se establecieron unos servicios mínimos del 50% que los sindicatos consideraban abusivos y, en vez de reducir los servicios mínimos al 25%, han dejado a Madrid sin Metro.


Efectos secundarios: atascos, gente desorientada, atobuses petados con sexagenarios pegándose por entrar, taxis haciendo el agosto...


Yo por ahora, voy en bici a trabajar... Cuando tenga que ir a aikido, ya veremos cómo me lo monto. Iré en tren, supongo.


Creo que las huelgas deben molestar para surtir efecto, pero en mi opinión, deberían haber respetado unos servicios mínimos aunque fueran establecidos por ellos mismos (el caos iba a ser igual o peor, si no mirad arriba, y la opinión pública no estaría tan alterada). Eso sí, seguro que hay gente que ha descubierto que se puede ir andando o en bici al trabajo y que no te pasa nada.
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martes, 29 de junio de 2010

Aprendiendo a ser una pija inglesa...

Continuación del curso de pijerio y arte moderno...


Para ser una pija sin fronteras, es importante saber de arte moderno. En las cenas de los diseñadores, nadie habla de Goya, Miguel Ángel o Fidias (están pasadísimos de moda, o sea)... Sin embargo, es muy importante saber quién ha ganado el Premio Turner. Es un premio que se entrega a artistas británicos menores de cincuenta años por una exposición sobresaliente o cualquier otra presentación de sus trabajos en un año. Lo organiza el museo Tate y los finalistas pueden exponer sus obras en el museo.

El ganador de la última edición fue Richard Wright por esta obra:


A mí me recuerda al estampado de las cortinas de Versalles, por eso nunca podré cenar con un diseñador y sentirme bohemia y artista mientras bebo vino y digo "cette eclosióooon"...


Pero mi ganador favorito es Chris Ofili...

No es broma, es arte moderno...
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lunes, 21 de junio de 2010

París underground

Lo que oculta el subsuelo parisino...


La humedad es lo que mata...


Aprovechando una generosa donación de puntos Iberia Plus y la coyuntura, me fui de fin de semana París. En esta ocasión, decidimos investigar los bajos fondos de la ciudad y nos adentramos en sus entrañas.

Comenzamos la visita por las
catacumbas. Aunque el precio no es prohibitivo (8 €), la cola suele ser disuasoria (échale una hora). Básicamente, son millones de huesos acumulados, con calaveras aquí y allá de decoración, que se han traído de cementerios variados. Se enterraron ahí aprovechando el hueco de las antiguas canteras (París está medio hueco, señores). La visita sin guía resulta un tanto decepcionante, supongo que resulta más impresionante si no has estado nunca en un sitio parecido. Pero si has visitado sitios como la capilla de los capuchinos de Roma, tampoco da tanto susto. Es un lugar a visitar por mero completismo.

Y con los cráneos, me haces unas cenefas a dos alturas...

Las catacumbas se encuentran en una de las salidas del metro Denfert-Rochereau, plaza en la que se cruzan varias de las típicas avenidas parisinas. Las calles aledañas son bastante bulliciosas y con restaurantes de precios... bueno, imaginaos, el
menú está entre 25 y 40 euros sin bebida, claro. Un lugar pintoresco es la rue Daguerre, una calle peatonal con puestos de mercado, restaurantes y cafeterías. Allí dimos con una alternativa francesa a la par que económica: una crêperie con terracita y todo. Se llama La belle ronde y cuenta con un jardín de lo más agradable si hace buen tiempo (o más bien si el mal tiempo es llevadero). A ver, barato barato no es, pero está bueno y es más barato que lo que hay alrededor.


Monumento a la guerra Franco-prusiana. Prueba de la modestia francesa, menos mal que esa guerra la perdieron...

Después de la comida (y sin siesta ni nada) nos dirigimos a las cloacas de la ciudad, visita romántica donde las haya. La entrada a las cloacas está situada cerca de la parada de metro Alma-Marceau, al ladito del túnel donde se estampó Lady Di. La visita es interesante, aunque yo la recomendaría solo a francoparlantes, ya que lo más interesante es hacer la visita guiada gratuita en la que te explican cómo se creó y funciona el sistema de alcantarillado, así como todo tipo de historias morbosas sobre bichos, armas y demás objetos que se puede llegar a encontrar en las cloacas. También, algunas pinceladas históricas sobre la Resistance y otros. En cualquier caso, el precio es bastante asequible (4,20 €) y si alguna vez te has preguntado qué pinta tiene una alcantarilla desde dentro: ¡esta es tu oportunidad de averiguarlo! De hecho, solo hay tres sistemas de alcantarillado del mundo visitables. A la salida, vistas impresionantes de la Tour Eiffel y el Sena.

Très jolie...

Para respirar aire puro tras la experiencia alcantarillil, y ver a unas amigotas que daba la casualidad de que estaban en París, nos dirigimos hacia uno de los parques (que yo creo que muchos no hay) de la ciudad. El parque se llamaba Buttes Chaumont y según me dijeron era una antigua cantera que reconvirtieron en parque (estos lo mismo te hacen un osario que un parque). Es el mismo concepto que el parque de las Siete Tetas pero en francés, que queda mucho más chic. Dentro del parque hay un bar de lo más animado, se llama Rosa Bonheur. Si hubiera llegado con el metro que era y no hubiera ido con la hora pegada al culo, me hubiera gustado disfrutar más del parque. Pero en fin, disfruté de la compañía y de la primera cerveza (carísima) de la tarde. El parque se encuentra en Belleville donde hubo una comuna (no hippie).

Perfectos emplazamientos para un botellón...

Ya con retraso sobre el tiempo estimado de excursión, dejamos a las amigotas y emprendimos rumbo a la Île de la cité, desde allí, cruzando la isla de Saint Louis, se llega al barrio judio-gay. No es que sea de judios gays, sino que es distrito compartido entre estos dos grupos
tan dispares. Allí estuvimos tomando una cervecita que nos salió a precio normal, ya que era la happy hour, en un pequeño bar con encanto: Piment Café. Dentro tiene varios ordenadores, las paredes están pintadas de rojo y era perfecto para sentarse y disfrutar de una cervecita charlando tranquilamente.

Garito durante el día con estudiante-poca-pasta en el interior...


Para el fin de fiesta, decidimos ir a cenar a un restaurante francés de la zona con un nombre de lo más inspirador: Les Philosophes. De hecho, en el cuarto de baño tiene citas varias de filósofos a granel y mientras estás "mandando un fax", puedes admirar su biblioteca. Ya que estaba solo un día decidí ir por la experiencia completa y cené un steak tartar y una île flotante. El steak tartar es básicamente una hamburguesa sin hacer (ya me queda una comida cruda menos que probar) y la isla flotante es una especie de nube de huevo montado sobre un mar de crema inglesa. La isla merece la pena, el steak solo lo recomiendo para amantes de la carne cruda.

Los espartanos no eran muy filósofos pero con un bien vino, hacían sus pinitos.

Así a eso de las 2 de la mañana y tras cenar, acabó el día. Por cierto, todo esto en vestido. Espero no haber pillado el tifus en las catacumbas.

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