
Ya que bajan los sueldos a los funcionarios un 5% han intentado hacer lo mismo con los empleados de metro que, claro, no son funcionarios y se ha liado parda.
Se establecieron unos servicios mínimos del 50% que los sindicatos consideraban abusivos y, en vez de reducir los servicios mínimos al 25%, han dejado a Madrid sin Metro.
Efectos secundarios: atascos, gente desorientada, atobuses petados con sexagenarios pegándose por entrar, taxis haciendo el agosto...
Yo por ahora, voy en bici a trabajar... Cuando tenga que ir a aikido, ya veremos cómo me lo monto. Iré en tren, supongo.
Creo que las huelgas deben molestar para surtir efecto, pero en mi opinión, deberían haber respetado unos servicios mínimos aunque fueran establecidos por ellos mismos (el caos iba a ser igual o peor, si no mirad arriba, y la opinión pública no estaría tan alterada). Eso sí, seguro que hay gente que ha descubierto que se puede ir andando o en bici al trabajo y que no te pasa nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario