Aikido

Como hay que practicar con el ejemplo, yo practico varios deportes con regularidad. Uno de los que más me gusta y más me aporta es el aikido.

El aikido es un arte marcial de origen japonés creada en el S. XX por Morihei Ueshiba que, a su vez, había practicado y dominado varias artes marciales. Pero vamos, sobre el origen y desarrollo de este arte marcial se puede leer en la Wikipedia o en Internet todo lo que queráis. Desde luego yo no soy la más indicada para hablar sobre el tema. En realidad, ni siquiera se me da especialmente bien el aikido (más bien soy torpe) y, sin embargo, repito que a mí me aporta mucho.

Oí hablar de este arte marcial por primera vez mientras estaba en Alemania. Fui a ver una clase de prueba y hubo algo que me convenció para practicarlo (espartanismos a parte), me convenció ver a una señora de unos sesenta años dando volteretas, rodando por el suelo etc. Pensé: si practicando esto puedo llegar a los sesenta dando esas volteretas, me apunto ahora mismo...
Ese año, no pudo ser, pero en cuanto volví a España me apunté. El aikido mejora la forma física general, los reflejos, la coordinación y la conciencia sobre el propio cuerpo y los movimientos. Se ejercita tanto el tren inferior como el superior (es bastante completo) y tiene una filosofía pacifista detrás bastante diferente de la de otras artes marciales competitivas. Se trata de utilizar la fuerza del atacante para neutralizar su ataque, no de atizar tú.

Voy a explicar lo de arte marcial no competitiva: en judo, karate, taekwondo etc. Los alumnos compiten entre sí, hay ganadores y perdedores. En aikido los alumnos colaboran entre sí, no se trata de aplicar las técnicas aprendidas en un combate contra un compañero, sino de practicar las técnicas para mejorar... Parece fácil, pero hacer bien cualquier técnica es muy pero que muy difícil. El que no haya combate, reduce bastante el riesgo de lesiones y accidentes porque es uno mismo el que se marca el ritmo y la intensidad.

En fin, que es un deporte completo que supone un desafío físico, mental y hasta espiritual (te hace cuenta de cosas como ciertas actitudes agresivas y nuestra respuesta a ellas etc.) Se puede practicar a cualquier edad y partiendo de cualquier condición física y solo requiere de cierta constancia y no desanimarse por mal que se te dé.

Si queréis más información sobre dónde practicarlo etc.

http://www.aikikai.org.es/